Puigdemont no acudirá a Montpellier con motivo de la marcha hasta el Parlament catalán que han planteado ANC y Òmnium Cultural. Si lo hace ya sabe que será detenido.
En previsión de que esto suceda policía española y francesa han mantenido conversaciones, de igual manera que lo hiciera el Ministerio de Interior español con el Gobierno francés siendo segun parece absoluta la cooperación.
Otra que está preparada es la Justicia española que será la encargada de tramitar a euroorden que nada más llegar a Francia, provocaría la detención y pondría a disposición de España al expresident catalán Carles Puigdemont y a los consellers.
Los contactos internacionales se han mantenido desde que JxCAT planteó al ex presidente catalán aparecer en los últimos días de campaña en Cataluña, justo antes de las elecciones del 21-D. El propósito de los separatistas era que Puigdemont saliese de Bruselas en el maletero de un coche, que cruzase la frontera y que apareciese en unos de los últimos actos de campaña en Barcelona para impulsar el voto de la vieja Convergència. Desde ese momento, España cerró unos acuerdos que siguen vivos y que tan sólo dependen de que se restaure la euroorden. Al final, Puigdemont decidió no aparecer pese al beneficio que hubiese ocasionado a su propio partido por el miedo que tiene a entrar en prisión. Y es que, desde el primer momento, la Fiscalía y la Justicia dejaron claro que en cuanto ponga un pie en España ira directo a prisión preventiva.
La situación ahora vuelve a repetirse de cara a la sesión de investidura. ANC y Òmnium pretenden que una marcha popular respaldada por particulares recoja a Puigdemont en Perpiñán y que lo acompañe ‘escoltado’ hasta el Parlament. Incluso los propios Comités de Defensa de la República (CDR) en Montpellier –unidades montadas para la defensa del golpe de estado– acaban de anunciar un acto –que consta de la proyección de un documental, la intervención de los invitados y el debate posterior– para este martes, a partir de las 20.00 horas, en el que el cartel del acto anuncia la intervención de Puigdemont. Eso sí, el cartel no especifica si va a intervenir con presencia física o por videoconferencia o cualquier otro sistema de presencia telemática.
Sobre Puigdemont no pesa en estos momentos una euroorden de búsqueda y captura. Y es que hay que tener en cuenta que el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarenadecidió retirarla para evitar que el expresidente fuera entregado por Bruselas por delitos menores a los de rebelión –Bélgica había anunciado ya que lo entregaría con esa condición–.
Pese a eso, según las conversaciones del Ministerio de Interior, la euroorden se podría tramitar de forma inmediata para ser detenido en Francia, lo que permitiría la detención del prófugo sin ninguna dilación. Y es que Francia no pretende limitar a determinados delitos la entrega.
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